“Lo que más valoro es el compromiso con el cuidado del medio ambiente” dice Renato mientras nos explica qué significa para Progreso ser Líder Ambiental: “Contamos con un sistema de gestión ambiental vanguardista que ha generado un cambio a nivel nacional. Nos enfocamos en velar por el cumplimiento de la legislación ambiental aplicable”.
Una de las maneras más sostenibles de operar es en el cuidado del agua. Con esto en mente, Planta San Miguel cuenta con una planta de tratamiento para el manejo de aguas residuales ordinarias de los servicios sanitarios de las áreas administrativas. Posteriormente, estas aguas son usadas para el riego de caminos y riego de áreas verdes. Con esto, el agua vuelve a su ciclo natural, no genera contaminación ni desperdicio.
Como otra de las formas de cuidar el agua, destaca el reservorio de la planta San Miguel de 116 metros cúbicos, principal captador de aguas pluviales. Su función es abastecer la planta en su proceso de enfriamiento de equipos (el proceso no usa agua como materia prima) hasta por dos meses, en el momento en que el abastecimiento normal dejase de funcionar.
“La visión que tenemos es seguir siendo líderes ambientales en Guatemala y en la región, consolidarnos y mantenernos ejecutando proyectos de desarrollo sostenible, reducción de emisiones y cumplimiento de legislación nacional.” explica.
