Francisco Castañeda: Gerente de la planta “San Miguel”
Tener sobre los hombros la responsabilidad de la planta “San Miguel” no es tarea fácil. Sin embargo para Francisco Castañeda, el papel más importante de su vida es ser papá de sus hijas de 14 y 12 años.
Son muchas las obligaciones para un papá “soltero”, y Francisco lo sabe bien. Por eso trata de pasar la mayor parte del tiempo son sus hijas y fortalecer la relación en en todos los momentos posibles.
“Al principio estaba aterrorizado. Pensar en vestir y entender a dos niñas fue el mayor reto de mi vida; sin embargo ahora puedo decir que todas las cosas las hacemos en equipo, desde la compra de ropa hasta nuestros fines de semana extremos”.

Francisco relata que se ha convertido en un experto para organizar las fiestas de cumpleaños de sus hijas. “Desde que eran pequeñas, nuestras celebraciones siempre han sido especiales. Me he convertido en un experto en la compra por internet y a domicilio de pasteles, piñatas y de todo para celebrar esos momentos que son únicos para nosotros”
Las condiciones actuales del mundo no les permitirán celebrar como se tenía planificado los 15 años de la hija mayor, sin embargo, esto no será impedimento para que Francisco pueda festejar esta fecha tan importante para su pequeña mayor.
“Aunque en la sociedad guatemalteca no es común ver a padres solteros, para mi ha sido un privilegio serlo, educarlas, entenderlas, corregirlas y aprender de ellas es una bendición que me acompaña en todas mis acciones”.
En las actividades de la planta es común ver a las dos niñas acompañar a su papá. “Ambas tienen su propio casco y su equipo de protección con su respectivo nombre”, relata Francisco, que sueña con ver transformadas en dos maravillosas mujeres a las nenas de papá. “Mis hijas tienen la responsabilidad de ser buenas ciudadanas pero sobre todo buenas personas, entendiendo su realidad y la realidad de las otras personas. Soy un padre orgulloso y afortunado al tenerlas”.